En este día
quisiera hablar sobre un tema el cual podría causar polémica entre un grupo de
cristianos quienes podrían o no tener sus diferencias al momento de contestar
esta pregunta: ¿se cansa Dios de perdonar? … Muchos dirán: no, Dios es un ser
misericordioso y muy lleno de amor y perdón y siempre está dispuesto a perdonar
nuestros pecados y volver a comenzar de nuevo. Antes de empezar a hablar sobre
este tema y explicarlo con más claridad me gustaría citar esta parábola que se
que encuentra en Lucas 13:6-9, la cual dice:
6 Dijo también esta parábola: Tenía
un hombre una higuera plantada en su viña, y vino a buscar fruto en ella, y no
lo halló.
7 Y dijo al viñador: He aquí, hace
tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala;
¿para qué inutiliza también la tierra?
8 Él entonces, respondiendo, le
dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella, y la
abone.
9 Y si diere fruto, bien; y si no,
la cortarás después.
Todos
sabemos que Jesús hablaba en parábolas, para así hacernos pensar y poder
aplicar las enseñanzas de esos mensajes a nuestra vida cotidiana. Aquí nos
habla sobre una higuera estéril que no daba frutos; la higuera estéril son las
personas del mundo, los impíos a quienes Dios siempre se mantiene tocando a la
puerta de sus corazones pero ellos nunca le abren y nunca quieren hacer caso a
su palabra, sino vivir conforme a las cosas terrenales y vánales. Luego nos
dice que el dueño de la tierra donde estaba plantada la higuera ya estaba cansado
de ir a buscar frutos pero que nunca hallaba así que ordeno al viñador que la
cortara, el viñador intercede por la higuera y pide un año más para abonarla en
intentar sacarle frutos pero que si al año no los da entonces será cortada. El
dueño de la tierra es Dios y el viñador es Jesus que es quien intercede por
nosotros ante el Padre. Se refiere a que Dios siempre a tenido gran empeño en
ayudar a las personas de la tierra, les envía pastores, misioneros, profetas y
toda clase de milagros para que crean y se conviertan a Él pero muchas personas
no quieren solo porque le llenan más las cosas mundanas. Ya Dios cansado de
esperar decide acabar con todo lo mundano y con él los que le siguen, pero Jesús
en su infinita misericordia intercede por nosotros y pide más tiempo para
intentar salvarnos.
Otro ejemplo
es el gran diluvio, Dios dijo a Noé muchos años antes del diluvio que predicara
a su gente para que ellos se convirtiesen pero al ver que todo estaba perdido decidió
terminar con eso y le mando a que construyera un arca y así Noé junto a su
familia se salvaron y Dios arraso con todo lo malo en la tierra. Estos pasajes
nos dejan más que claro que Dios si se cansa de perdonar, y sí,
Dios es misericordioso pero todo tiene su límite y El ya está dispuesto a arreglar
este mundo para los que sí creen en él.
Así que en este día les exhorto que atiendan a la
palabra, que la sigan y se entreguen a Jesucristo ya que El es nuestra única salvación
de la destrucción que viene.
Autora: Rut Contreras
